A pesar de ser un tema delicado pues envuelve la vida de una joven y su hijo no nacido, de una madre que imploro justicia durante un año y de un padre que agotó todas sus fuerzas, el caso Emely Peguero ha dejado grandes lecciones para la sociedad dominicana, tanto en materia judicial como educativa y social. una de ellas es la aprobación de un nuevo Código Penal que se adapte a las realidades sociales no solo de nuestro país sino también del mundo. Un código que tipifique más delitos y contemple sanciones acordes a ellos, que tengan penas que vayan según el grado del delito cometido pues el código penal de nuestro país establece de seis meses a dos años de prisión a una persona que oculte un cadáver o encubra el mismo lo cual es una burla para nuestra sociedad. Caras vemos corazones no sabemos. Estoy segura que la madre de Emely nunca se imaginó que su vecina y que ese joven que vio crecer ...
La Aventura De Ser Negra.